Las cortinas juegan un papel fundamental en la decoración de interiores; claro, sin quitarles protagonismo a los demás muebles que complementan la sala. Los estampados y colores chillones han quedado atrás, hoy en día se busca que de alguna manera las cortinas vistan la habitación, pero no sean el punto focal de la misma. Las cortinas neutras se encuentran en la cabeza de la moda, por así decirlo, pues proporcionan un ambiente fresco, limpio y sereno, con sus texturas lisas, colores suaves y pasteles.
Si se busca algo más vivo, las cortinas bicolor son la mejor opción. Esta tendencia se caracteriza por el contraste de tonos entre sí, ya sean dos colores opuestos e intensos o un color fuerte en la franja inferior sobre una cortina de color luminoso. Por otra parte, encontramos las cortinas oscuras, las cuales aportan carácter a la estancia, debido a que suelen ser empleadas en espacios luminosos, y combinadas con algún otro mueble que se encuentre en la misma.
Para darle un toque personal al hogar, las cortinas de terciopelo son las que se necesitan, ya que funcionan muy bien en espacios con colores y muebles básicos, de esta forma dando un contraste diferente a la habitación a decorar. Otros tipo de cortinas son al ras del suelo, más adecuadas para ambientes modernos e informales; sin embargo, si se desea conseguir un aire clásico y elegante, sin duda se debe dejar que la cortina se arrastre unos 20cm por el suelo.
Los clásicos siempre están presentes, por supuesto, agregando ese detalle que los hace estar en tendencia. Unir las cortinas con un tono más fuerte y los visillos en tonos más claros de la misma gama, que permitan la entrada de luz, da un toque sencillo pero con mucho estilo a la hora de contrastar. Son un una hermosa unión que no se puede desaprovechar. La cortina, por ser un elemento tan básico, siempre dará ese toque que se busca en los espacios interiores, gracias a su fácil mezcla de colores y formas.